"En aquellos remotos tiempos, en que bastaba desear una cosa para tenerla, vivía un rey que tenía unas hijas lindísimas, especialmente la menor, la cual era tan hermosa que hasta el sol, que tantas cosas había visto, se maravillaba cada vez que sus rayos se posaban en el rostro de la muchacha. Junto al palacio real se extendía un bosque grande y oscuro, y en él, bajo un viejo tilo, fluía un manantial. En las horas de más calor, la princesita solía ir al bosque y sentarse a la orilla de la fuente. Cuando se aburría, se ponía a jugar con una pelota de oro, arrojándola al aire y recogiéndola, con la mano, al caer; era su juguete favorito."
Así comienza el cuento de los Hermanos Grimm en el que me inspiré para hacer la escena de mi cajita decorada "El Príncipe Rana"
¡Buenos días!!
Me encanta decorar las cajas de todo tipo, sobre todo crear una escena con figuritas hechas de fimo (arcilla polimérica).
El otro día me vi con una caja de quesitos vacía en mis manos y me dije.. Qué pena desaprovechar esto.. jaja, mis hijas me miraron como diciendo Qué loca está mi madre...!! Pero yo me puse manos a la obra;
Pinté la cajita de blanco y cuando secó le di una capa de verde mezclado con azul y amarillo para simular el color de una charca.
Luego creé mi escena a partir de la figurita que hice, una ranita encantada. Forré la caja y voilà ... este es el resultado...
Los materiales que utilicé son; fimo para las figuritas, fimo líquido para el agua, cinta decorativa y gomeva de diferentes colores para forrarla, para los juncos dos palitos de color verde.
Estas son algunas fotos del proceso, aunque creo que no tiene ningún misterio.. ;)
Para finalizar, le puse unos protectores de fieltro en la parte de abajo para que no se dañe la gomaeva del fondo.
Bueno, pies eso es todo amig@s, solo espero que os haya gustado. Un saludo y hasta la próxima !!
No hay comentarios:
Publicar un comentario